viernes, 20 de agosto de 2010

qué pequeños somos


Somos tan grandes o tan pequeños como queramos, depende de al lado de quién y cómo nos coloquemos. Y no me refiero en sentido estricto a la ubicación física, aunque también.


Somos la única especie viva sobre la Tierra capaz de crear una tecnología que progresivamente avanza imparable hacia límites insospechados. Tecnología que puede ayudarnos a sobrevivir como especie más tiempo de lo que la naturaleza por sí sola nos permitiría pero que también puede aniquilarnos junto a otras especies en menos tiempo de lo que hemos tardado en desarrollarla.


Es importante que de cuando en cuando hagamos el sano ejercicio de compararnos con lo que hay más alla de lo que vemos día a día, que reflexionemos sobre lo limitado de nuestro poder como especie para vulnerar o cambiar las fuerzas naturales, que recordemos que las leyes que gobiernan el universo lo hacen también sobre nosotros y que no tenemos posibilidad de cambiarlas, aunque podamos estudiarlas, analizarlas, imitarlas e incluso comprenderlas.


La misión MESSENGER, que fue lanzada por la NASA el 3 de agosto de 2004, en su viaje hacia Mercurio para orbitarlo y estudiar su campo magnético, composición del núcleo y su geología, a través de su cámara WAC nos ha regalado una imagen de nuestro planeta junto a la Luna vistos desde una distancia de 183 millones de kilómetros, es decir, aproximadamente 33 millones de kilómetros más distante de lo que lo estamos del Sol.
Creo que más palabras sobran si observamos la imagen mientras reflexionamos un poco.
Créditos: NASA / Universidad Johns Hopskins Laboratorio de Física Aplicada / Institución Carnegie de Washington